Los Testigos de Jehová Calumniados...

"Porque, verdaderamente, en lo que toca a esta secta nos es conocido que en todas partes se habla en contra de ella”.(Hechos 28:22)

Los "SANTOS" de la Iglesia Católica...


Una decisión controvertida

En septiembre de 2000, el papa Juan Pablo II beatificó a Pío IX, cuyo pontificado se extendió de 1846 a 1878. El historiador francés René Rémond escribe en el diario católico La Croix que este pontífice adoptó “decisiones opuestas al espíritu del Evangelio, como permitir la ejecución de patriotas italianos condenados a muerte por cuestionar su poder como jefe de Estado”.


Refiriéndose a él como el “último monarca absoluto de Europa”, el periódico Le Monde destaca la intolerancia de este Papa rey y, sobre todo, su lucha contra “la libertad de conciencia, los derechos humanos y la emancipación de los judíos”. El rotativo agrega que “condenó la democracia, la libertad de religión y la separación de la Iglesia y el Estado”, así como “la libertad de prensa, de pensamiento y de asociación”.

Además, fue él quien inauguró en 1869 el Concilio Vaticano I, el cual definió la doctrina de la infalibilidad del Papa en cuestiones de fe y moralidad.

Enlace a Wikipedia:
http://es.wikipedia.org/wiki/Beato_P%C3%ADo_IX#Beatificaci.C3.B3n

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¿Son los testigos de Jehová una secta peligrosa?


SE ACUSÓ a Jesucristo de ser borracho, glotón, violador del sábado, falso testigo, blasfemo y mensajero de Satanás. También se le inculpó de subversión. (Mateo 9:34; 11:19; 12:24; 26:65; Juan 8:13; 9:16; 19:12.)

Después de la muerte y resurrección de Jesús, sus discípulos fueron de igual modo el blanco de graves acusaciones. Una muchedumbre arrastró a un grupo de cristianos del siglo primero ante los gobernantes de la ciudad, clamando: ‘Estos hombres han trastornado la tierra habitada’. (Hechos 17:6.) En otra ocasión, se llevó al apóstol Pablo y a su compañero Silas ante las autoridades y se les acusó de turbar muchísimo la ciudad de Filipos. (Hechos 16:20.)

Más tarde se acusó a Pablo de ser “un individuo pestilente [...] que promueve sediciones entre todos los judíos por toda la tierra habitada”, así como de querer “profanar el templo”. (Hechos 24:5, 6.) Los judíos principales de Roma reflejaron con exactitud la situación de los seguidores de Jesús cuando reconocieron: “Porque, verdaderamente, en lo que toca a esta secta nos es conocido que en todas partes se habla en contra de ella”. (Hechos 28:22.)

Está claro, pues, que había quien consideraba a esa nueva comunidad fundada por Jesús como una agrupación religiosa con ideas y prácticas radicales que chocaban con el comportamiento social aceptado entonces. Sin duda, muchas personas de hoy hubieran considerado a los cristianos una secta destructiva. Los opositores eran con frecuencia miembros eminentes y respetados de la sociedad, lo que daba más peso a sus acusaciones. Muchos creyeron las acusaciones lanzadas contra Jesús y sus discípulos. No obstante, como probablemente sepa, cada uno de esos cargos era falso. El hecho de que la gente dijera esas cosas no las hacía verdaderas.

¿Y hoy día? ¿Sería exacto referirse a los testigos de Jehová como una agrupación religiosa con ideas y prácticas que chocan con la conducta social aceptada? ¿Son los testigos de Jehová una secta peligrosa?